Alonso, más cerca de Renault que de BMW

La última piedra que ha encontrado Fernando Alonso en su hipotético camino hacia Ferrari, con la cláusula ejecutada por Raikkonen para renovar hasta 2010, ha dado un nuevo giro de tuerca a una partida de ajedrez cada vez más enrevesada. El movimiento del finlandés encontró una rápida y lógica respuesta de apoyo por parte del presidente de Ferrari, Luca di Montezemolo. Son exigencias del guión.

El año pasado, cuando Massa tuvo que frenar en Brasil para que Kimi ganase el título lo hizo sin rechistar y ahora le toca Kimi devolver el favor porque la única opción de que en Maranello sumen un nuevo título pasa porque el brasileño sume todos los puntos posibles y su compañero no le reste ninguno. No es, por tanto, el momento de incomodar al actual campeón. Ni los ingenieros ni los mecánicos de Ferrari sintonizan con un piloto tan rápido en la pista como frío en su relación con el equipo, mediocre en su implicación para mejorar el auto y con alarmantes pérdidas de concentración durante los últimos meses. En eso Massa le ha dado lecciones.

Los jefes técnicos de Ferrari, convencidos de que Alonso es el piloto más a Schumacher

Los jefes técnicos de Ferrari, empezando por Domenicalli, añoran a Schumacher y llevan tiempo convencidos de que Alonso es el piloto más parecido al alemán y su sucesor ideal (brillante, trabajador, obsesionado con la mejora del auto y muy meticuloso con cada detalle del monoplaza). Sin embargo, la política y las facturas pendientes se están imponiendo a un deseo mutuo por ambas partes.

Así las cosas, el asturiano tiene que elegir entre dos opciones: BMW, con quien se involucraría de lleno en un proyecto de presente y futuro que, seguramente, le mantendría varios años ligado a ellos, o la continuidad en Renault, con la esperanza de una considerable mejora y esperando que en Ferrari le abran la puerta a medio plazo.

El Banco de Santander entrará en 2010 en Ferrari y hará todo lo posible por fichar a Alonso

No se puede ni se debe esperar eternamente y él no tiene la garantía absoluta de que esa unión vaya a consumarse en un futuro pero tiene indicios de que puede ser así y un regalo de esa magnitud merece la pena correr un cierto riesgo. El Banco Santander entrará en 2010 como patrocinador del equipo más legendario y lo hará con una fuerte inyección de dinero y con la firme intención de hacer todo lo posible por convencer a Montezemolo para que Alonso vista de rojo aunque, a pesar de los rumores, no llegará al extremo de pagar una indemnización a Raikonen por su despido porque Ferrari no permitiría ese tipo de injerencias. Por ese motivo y, sobre todo, porque no cree que BMW vaya a ser muy superior a Renault el próximo año con las nuevas reglas, está más próximo a quedarse que a cambiar de auto. En la fábrica de Enstone conoce a todo el equipo, le tratan como se merece y, con las limitaciones propias de un equipo con un presupuesto lejos de las grandes escuderías, le dan todo lo que pueden (al importantísimo simulador, por ejemplo, no llegan).

Una nueva era en 2009

En 2009 el panorama actual puede cambiar porque comienza una nueva era: vuelven los slicks (neumáticos lisos), se producirá una considerable reducción de la aerodinámica y se innovará con el KERS (un sistema que almacena la energía que desprende el auto en la frenada para después aprovecharla durante unos 7 segundos en cada vuelta con un plus extra de potencia de 80 CV más o menos). Aunque los poderosos lo seguirán siendo, todos partirán de cero y el que encuentre el atajo más rápido y seguro ganará muchas posiciones. No parece que vaya a producirse un anuncio a corto plazo y la decisión aún no es firme pero la balanza se va inclinando progresivamente la marca del rombo.