Schumacher ya comenzó la preparación

Michael Schumacher comenzó a trabajar con dos preparadores personales para su vuelta a la F1, que le reportará 3,2 millones de euros por carrera y que fue recibida con euforia, pero también con algunas dudas. El siete veces campeón de la F1, de 40 años, inició trabajos en su casa suiza de Gland, de 15 hectáreas, que posee hasta un centro hípico, mientras que Ferrari comenzó a adaptar su máquina número 3, que corría el accidentado Felipe Massa.

El piloto alemán mide 1,74, contra 1,66 de Massa, por lo que se modificará asiento y distancia de los pedales, aunque Schumacher sólo podrá probar a la Ferrari F60 en las pruebas libres del 21 de agosto, dos días antes del GP de Europa, en Valencia.

Schumacher, que ganará 3.266.194 euros por cada una de las siete carreras que restan para completar el Mundial 2009, trabajará especialmente en su cuello, donde se lastimó corriendo en motos, en febrero pasado. El piloto, que se retiró en octubre de 2006 y no maneja monoplaza de F1 desde abril de 2008, precisa una nueva "superlicencia", que se renueva cada año, aunque los reglamentos de la Federación Internacional de Automovilismo (FIA) contemplan excepciones. El artículo 5, apéndice L, establece que a un piloto podrá concedérsele una licencia si corrió en un mínimo de quince carreras en los tres últimos años y Schumacher compitió en 18 pruebas del Mundial de 2006.

"Vuelve la leyenda", tituló en portada el popular diario Bild, que publicó numerosos apoyos de figuras del deporte alemán sobre el anuncio ayer de la vuelta de Schumacher, el máximo piloto de todos los tiempos en la F1.

Sebastian Vettel, actual esperanza alemana en la F1, admitió su "gran sorpresa" por la noticia, en tanto el jefe deportivo de Mercedes, Norbert Haug, admitió que es la "mayor sorpresa positiva" que podía vivir la categoría.

Schumacher ganó cinco de sus siete títulos de modo consecutivo con Ferrari y posee todos los récords en la F1, incluídos el número de carreras ganadas, puntos conseguidos, poles, vueltas rápidas y títulos mundiales.

"Vuelve el kaiser, arde Valencia", "Schumi en auxilio de Ferrari" y "Vuelve Schumi, vuelve la leyenda", son algunos de los titulares a su vez de la prensa española, feliz porque Valencia vivirá "un evento histórico", como dijo la firma Valmor Sports, organizadora del GP de Europa en esa ciudad.

Hasta la preocupación ante la eventual baja del ídolo local Fernando Alonso, por la suspensión de Renault, quedó relegada, como lo reflejó el renovado entusiasmo de la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, aunque confió "en la vuelta de un duelo Alonso-Schumacher", en tanto algún medio especula preguntándose si acaso ambos no serán compañeros en Ferrari en 2010.

El contraste fue ofrecido en Inglaterra por The Guardian, para el cual Schumacher protagoniza "el retorno más dramático" luego del de Lauda en 1982 y "pone en juego su reputación", pues puede dejar de ser un ex gran deportista y pasar a ser "un ex campeón triste". "No hay nadie mejor para sustituir a Felipe" (Massa), afirmó a su vez Rubens Barrichello, ex compañero de Schumacher en Ferrari, aunque sin mucho entusiasmo, producto acaso de viejas diferencias.

"¿Qué opino de la vuelta de Schumacher?, pues que no hay nadie mejor para sustituir a Felipe, pero lo que yo realmente quiero es que Felipe quede bien, el resto es el resto", comentó Barrichello, sin más.

Justamente Massa, cada vez mejor tras el grave accidente que sufrió en la clasificación del GP de Hungría, dejó su parte en medio de tanta expectativa: ¿vuelve Schumacher?, "hay que ver si yo lo dejo", ironizó Massa.