Valencia pide revisar sanción contra renault

La alcaldesa de Valencia pidió a la Federación Internacional de Automovilismo (FIA) que revise la suspensión de Renault, ante el fiasco económico que podría provocar la ausencia de Fernando Alonso, a quien algunas versiones llegaron a sentarlo en la Ferrari de Felipe Massa.

La alcaldesa Rita Barberá dijo a la FIA que Alonso es el "máximo atractivo" del GP de Europa que se correrá en Valencia el 23 de agosto y advirtió que su eventual baja supondría "un grave obstáculo para el desarrollo feliz" de la prueba.

Aunque "todos tenemos que defender la máxima seguridad en el circuito", Barberá instó a la FIA a "reflexionar" sobre si la posible sanción a Renault se puede cumplir en otra edición del GP para "no privar del atractivo o valor añadido" de Alonso.

"Se debe valorar por parte de la FIA, o quien tenga que juzgar, el daño añadido que se le puede hacer al atractivo de la celebración de un GP cuando se le castiga con la ausencia del corredor propio, después del año que han pasado", añadió.

Esta última frase, según analistas, pareció una referencia a la fuerte disputa que la FIA tuvo este año con las escuderías, pues medios locales afirman que la sanción es exagerada y que es una revancha de Max Mosley, presidente saliente de la FIA, contra Flavio Briatore, director de Renault.

La escudería francesa apelará la suspensión que le impuso la FIA al condenarla por imprevisión por no haberle avisado inmediatamente a Alonso que a su máquina, tras pasar por boxes, se le había desprendido un neumático en plena pista, en el GP que se corrió en Hungría.

"Mosley le tenía ganas a Briatore", afirmó Víctor Seara, especialista del diario Público, al recordar que el segundo "fue uno de los impulsores de la F1 paralela", cuando las escuderías discutían duramente con la FIA, hasta sólo un mes atrás. "Por el momento no hay declaraciones", dijo Patricia Spinelli, vocera de Renault, que pagó los 6.000 euros que le permiten apelar la sanción de la FIA, también considerada "excesiva" por Joan Villadelprat, especialista de El País.

Otros medios españoles dijeron hoy que el Comité de Apelación de la FIA, podría trasformar la suspensión en multa o reprimenda, "al no existir pruebas de la consciencia de la infracción".

El circuito de Valencia, que debió reducir su capacidad de 115.000 personas a 70.000 y sólo vendió hasta ahora 30.000 boletos para la carrera, debe pagarle a Bernie Ecclestone un canon equivalente a 40.000 localidades, por lo que la eventual ausencia de Alonso podría ser un golpe durísimo.

Medios españoles dijeron que Ecclestone intervendrá y no permitirá que Alonso esté ausente en Valencia, para evitar un "desastre", como lo definió Adrián Campos, ex piloto español de F1 y que en 2010 dirigirá la primera escudería española en la categoría. Campos agregó que la situación podría mejorar si Ferrari reemplaza a Massa con el piloto catalán Marc Gené (probador de la escudería italiana), a lo que se suma el novato Jaime Alguersuari, debutante en Hungría en Toro Rosso.